Etiquetas

domingo, 21 de enero de 2024

Tautograma con e

Empezó en el edificio embrujado. En él exclamaba exaltado Evaristo el enfermero: Estoy esperando. Esperando encontró entre estanterías el engaño. Estaba en embajada ecuatoriana, no en el estadio. Enterado de el engaño enfureció. El error era evidente, entonces entendió todo. Era Emilio el engañador, entonces exclamó enrabietado: ¡Emilio experimentarlas estremecimiento! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Todos pagamos por pecadores.

 Cada vez el ser humano es mas cruel y no tiene piedad en hacer cualquier cosa por conseguir lo que quieren, sin importar si muere un inocen...