Bullying

 El bullying escolar es una de las violencias más duras que existen, ya que lo sufre gente muy pequeña que muchas veces no es capaz de lidiar con el, ni de encontrar una salida. 

Primero que nada creo que hay que darle mucha más importancia a este acoso del que ya se le da. En muchos casos, cuando ocurre algo así, bien los padres o bien los profesores le restan importancia diciendo que son cosas de niños y que las discusiones a esas edades son normales. Sin embargo, el bullying está muy lejos de una simple discusión y puede llevar terribles consecuencias, como las que hemos visto en varios casos. Por ello, en mi opinión, un caso claro de bullying, debería ser motivo suficiente para expulsar al agresor del centro. Un simple toque de atención solo sirve para que el agresor se enfade más con la víctima y la siguiente vez vaya a por ella con más fuerza y agresividad. Creo que si se tomasen medidas tan radicales como el comportamiento del agresor, como lo sería una expulsión definitiva, muchos de los que van de valientes, persiguiendo a personas “débiles”, se lo pensarían dos veces, porque los que hacen bullying no son ningunos valientes, ya que atacan una persona en manada.

En segundo lugar, por lo que respecta a Andoni, creo que puede hacer varias cosas. Creo que lo primero que tendría que hacer sería encarar a sus agresores, ya que como he dicho antes, muchos de ellos son unos cobardes que cuando su víctima no se deja intimidar, se acojonan. Sin embargo, no todas las personas sean capaces de hacer esto, por lo que otra opción sería hablar con el colegio seriamente, contarle lo sucedido, aportar las pruebas de ello y exigirles que tomen medidas para solucionar el problema. Al fin y al cabo el colegio tiene que ser un lugar, seguro donde los niños pueden aprender y no puede estar condicionados por ese tipo de insensatos.

Por último, creo que si después de hacer todo esto, los chavales redujeran su mal comportamiento, pero no acabasen de dejar de molestarle, creo que Andoni tendría que mostrar indiferencia. La indiferencia frente a alguien que quiere molestar es algo que fastidia mucho al agresor y muy posiblemente si éste no nota reacción en su víctima, dejará de molestarla. 

Ahora bien si el abuso no se reduce, hay que seguir tomando medidas. Lo peor que puede hacer una víctima es tragar y tragar hasta explotar. Por qué al hacer esto se está dando la satisfacción al agresor de hacer daño, y la víctima pasa un muy mal rato. Aunque a veces parezca que no, si se habla con la gente indicada y se toman las medidas correctas, se puede solucionar.