Bullying

 Desgraciadamente los casos como los de Andoni no son casos aislados, y mucho menos “cosas de críos” como muchos afirman. El bullying es un un asunto muy serio y a veces el detonante de que muchos niños y niñas desarrollen enfermedades mentales o incluso, en el peor de los casos, quieran quitarse la vida.

 Esto no es para nada una exageración, ojalá lo fuese. Por ello, si viese que un niño como Andoni está pasando por una situación similar, lo primero de todo le intentaría dejar claro que nada de lo que ha pasado es culpa suya. Intentaría meterle en la cabeza que no tiene que cambiar su forma de ser, ni su físico ni sus gustos por encajar. Que lo que ha pasado en ningún momento ha sido generado por él.

Más tarde, le explicaría lo importante que es contarle la situación a un adulto. Bien porque así podrán ayudarle, y si es necesario, recurrir a un profesional, o bien para intervenir en la situación e implantar alguna medida contra los abusadores. 

Por último, le animaría a que buscase un círculo de personas que se muevan por las mismas cosas que él, ya sea en alguna extraescolar, deporte, por redes sociales, etc. Así, al compartir gustos con otra gente, se sentiría menos solo y podría construir un ambiente en el cual se sintiera cómodo. 

En conclusión, al ver el mínimo indicio de bullying es importante intervenir e intentar poner fin a la situación lo antes posible para que esta no llegue a más.