Primero de todo, lo mucho que quiero a mi ama, mi aita, mi hermano y mi amama. Que no se les olvidase nunca. Les agradecería por todo lo que han hecho por mí. Por darme un hogar, una buena educación y buenos valores sobre los que vivir. Les diría que me recordasen por las cosas buenas que he vivido, por las cosas que me hicieron ser como era, no por como fui o podía haber sido. Y les diría muchísimas cosas más, como recuerdos bonitos de experiencias vividas que me llevo conmigo para siempre. Además, también me despediría de mis amigos y muchas otras personas cercanas a mí que marcaron mi vida.
Pero, por otro lado, desgraciadamente en este contexto, tendría que avisarle a mi ama, a mi familia y a todo el mundo de los peligros de la guerra. Les diría que tuviesen muchísimo cuidado y qué se ayudasen y apoyasen entre ellos más que nunca, que no se fiasen de prácticamente nadie. Probablemente, les aconsejaría que se fuesen de aquí, que huyesen y que se vayan a cualquier otro sitio para protegerse a sí mismos.
Básicamente, creo que queda bastante claro que realmente no tendría ni idea de qué decir y que probablemente mi carta quedaría muy corta porque no podría expresar lo mucho que quiero y demás cosas en tan solo unas pocas palabras. Se me pone un mal cuerpo terrible solo poniéndome en la situación de escribir esta carta hipotéticamente y aún más pensando que hay gente que la ha tenido que escribir de verdad. Simplemente no me cabe en la cabeza cómo hay gente que viendo cartas así pueda querer la guerra en ningún lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario