Grafitis

 Los grafitis han sido un tema muy polémico desde hace mucho tiempo. Podemos encontrar todo tipo de opiniones, desde los que creen que son arte tanto como una pintura que puedes encontrar en un museo ya que así como en esas obras el artista está transmitiendo algo.  Y otros que creen que deberían de ser ilegales. En mi opinión no es tanto el hecho de que pueda ser considerado arte o no sino donde están hechos.

Hay muchos grafiteros muy reconocidos y que han hecho muchas ciudades muy famosas y más únicas. Pero una cosa es que se les pida hacer un mural y otra muy distinta es que a una persona le apetezca ir por ahí plasmando su firma o sus garabatos por espacios públicos e incluso privados. En estos casos es cuando se deja de considerar arte y pasan a ser un claro acto de vandalismo.

Como el caso de la puerta de este garaje hay millones más. Nadie debería de tener que pagar por lo que hayan hecho otras personas voluntariamente. Se deberían de poner remedios más estrictos para que estos “artistas” se lo piensen dos veces antes de hacer una de sus pintadas en un lugar donde nadie les ha pedido que las hagan. Al fin y al cabo, a nadie le gustaría encontrarse la puerta de su casa pintada y, además, tener que pagar para arreglarla porque a otra persona le apetece “expresarse” allí  sin tener en cuenta los daños que puede ocasionar. 

En resumen los grafitis solamente deberían de ser legales cuando no perjudican a nadie y se hacen por petición. Así se podrían dejar de considerar vandalismo y empezar a considerar arte.