Creo que va a ser muy raro vivir un primer verano en el que no sepa que me voy a encontrar a la vuelta, en septiembre. En el que sepa que no voy a volver a esos mismos profesores, mismo colegio, mismos amigos... Va a ser muy raro.
Echando la vista atrás, y dándome cuenta de que año tras año me he recorrido todas las clases y todos los edificios del cole, desde el patio de arriba hasta el primer piso, me vienen muchos recuerdos y muchos momentos. Porque aunque no haya terminado todavía, ya que nos quedan aún momentos como la graduación, se puede oler ya el final.
Por eso, aunque a veces ni siquiera era consciente, palabras como exámenes, castigos o retrasos no van a ser las primeras que se me ocurran cuando me acuerde del cole. Sino que me vendrán a la cabeza otras como risas, diversión y amistad. Porque quieras que no, los momentos buenos han sido mucho más que los malos. Por eso, espero que aunque las siguientes generaciones que ocupen nuestro lugar no vayan a ser ni mucho menos iguales que la nuestra, tengan una experiencia tan buena y se lleven un recuerdo tan completo como el que me llevo yo del curso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario