Desde pequeña siempre me ha encantado la tortilla de patata. Cada jueves de invierno a la noche, siempre que podemos, en mi casa cenamos eso. Desde que tengo uso de razón siempre ha sido así.
Nunca se me había ocurrido preguntarle a mi madre por la receta hasta hace tres años. Desde ahí en adelante empecé a practicar y ahora considero que me sale bastante bien.
Para poder hacerla se necesitan huevos, patatas, cebolla, sal y aceite. Concretamente, 5 huevos, 5 patatas y 1 cebolla.
Para comenzar, yo siempre utilizo un cuchillo de cocina que esté bien afilado, para que me sea más fácil cortar y pelar las patatas, y con el mismo cuchillo parto la cebolla. Hay gente prefiere utilizar un pelador para ello, pero a mi no se me da bien pelarlas con ese utensilio. A continuación, pongo a fuego lento la cebolla para que se poche junto con las patatas.
De mientras, rompo los huevos y los bato en un vaso de cristal. Una vez que la cebolla y la patata estén bien pochadas, procedo a quitarles todo el aceite poniéndolo todo sobre papel de cocina. Seguidamente, vuelvo a poner todo en la sartén y añado los huevos batidos y una pizca de sal.
Por último espero a que la parte de abajo de haga bien y le doy la vuelta con la ayuda de un plato y espero otra vez unos tres minutos a que se haga la base y la emplato.
Siempre la corto en triángulos proporcionales para cada uno de mis hermanos ya que suelen haber disputas acerca de quién se ha llevado el trozo más grande
No hay comentarios:
Publicar un comentario